En este artículo

¿Estás en perimenopausia o menopausia y has estado experimentando más alergias o nunca habías tenido y como de la nada empezaron a aparecer? ¿Tienes un acné que nunca habías tenido?

Podrías tener un problema de intolerancia a la histamina por exceso de estrógeno.

Ronchitas, ronchas grandes, piel enrojecida, nariz congestionada o que corre demasiado, sinusitis crónica y ojos llorosos, son sólo algunos de los síntomas relacionados con exceso de histamina que probablemente te suenen familiares, pero más adelante vas a conocer otros posibles síntomas que quizás no estés relacionando como ansiedad y dolores articulares.

En este artículo te explico por qué los síntomas se exacerban en estas etapas de la vida, por qué es importante saberlo antes de decidirte por una terapia de reemplazo hormonal y qué relación tiene con la pastilla anticonceptiva.

¿Qué es intolerancia a la histamina?

Aunque la intolerancia a la histamina es una condición poco comprendida y poco reconocida en el mundo de la medicina convencional o alópata, es de especial importancia tenerla en cuenta y que sepas de qué se trata tiempos de perimenopausia y menopausia porque influye directamente en tu balance hormonal, en cómo vives la transición hacia la menopausia, y en la forma en la que respondes a una terapia de reemplazo hormonal.

Pero también es muy importante tener en cuenta que puede afectar a las mujeres en cualquier etapa de la vida fértil. Especialmente en las siguientes situaciones:

• En adolescentes
• Durante el embarazo
• En post parto
• Mujeres con endometriosis
• Mujeres con Síndrome de Ovario Poliquístico o periodos irregulares
• En perimenopausia

El común denominador en todas estas situaciones es un exceso de estrógeno

Pero vamos ahí más adelante.

La intolerancia a la histamina es un desbalance entre la producción, procesamiento y eliminación de la histamina en el que tu cuerpo no es capaz de “romperla” o procesarla y eliminarla adecuadamente, lo que ocasiona un exceso de histamina que con el tiempo puede manifestarse con síntomas incómodos que pueden verse muy diferentes de persona a persona. Estos síntomas frecuentemente imitan síntomas de reacciones alérgicas, pero puede manifestarse con otros síntomas que no se parecen en nada a reacciones alérgicas.

Síntomas de intolernacia a la histamina

Los más comunes incluyen:

• Ronchas
• Comezón sin aparente razón
• Enrojecimiento
• Sensación como de falta de aire
• Migrañas
• Ansiedad
• Depresión
• Mareos
• Insomnio
• Problemas digestivos que incluyen indigestión, náusea y Síndrome de Intestino Irritable
• Palpitaciones
• Dolores articulares
• Síntomas respiratorios como sinusitis crónica o nariz congestionada
• Incapacidad para regular la temperatura (bochornos)
• Acné

La mayoría de las personas no tienen todos los síntomas y pueden ser intermitentes o continuos. Mientras más exceso de histamina, más se acumulan síntomas.

¿Qué es la histamina?

La histamina es un químico mensajero muy importante en tu cuerpo. Está especialmente involucrado en el cerebro y sistema nervioso, en tu sistema digestivo, y es parte crucial de tu sistema inmune.

En el cerebro actúa como neurotransmisor, en el sistema inmune como activador de respuestas inflamatorias puntuales y alérgicas y en el intestino juega un papel en la regulación de la permeabilidad intestinal así como en la respuesta inflamatoria.

La histamina además, estimula a los ovarios a liberar estrógeno. Esto es muy importante que lo sepas para cuando lleguemos a la relación de la histamina con el estrógeno.

¿Cómo se elimina la histamina?

Hay dos enzimas encargadas de degradar y eliminar la histamina: La Diamino Oxidasa (DAO) y la Histamine N-Metiltransferasa (HNMT). Cada una se encarga de eliminarla de diferentes fuentes y lugares en tu cuerpo.

La DAO se encarga principalmente de eliminar histamina de los alimentos que consumes. Todos tenemos diferentes cantidades de DAO dependiendo de nuestra genética, con la que no podemos hacer mucho, pero lo importante aquí es que gran parte de su eficiencia y disponibilidad depende de la salud de tu intestino. ¡Con eso si podemos hacer mucho!

La HNMT se encarga principalmente de regular la concentración de histamina en el cerebro.

Del balance de estas dos enzimas depende la regulación de histamina en tu cuerpo y en tu cerebro. De ahí los síntomas “como por todos lados”.

¿Qué ocasiona demasiada histamina?

• Activación constante de los mastocitos por exposición a alergenos externos. Esto incluye moho, algunos alimentos y toxinas en el ambiente.

• Comer demasiados alimentos que contienen histamina o que bloquean la enzima DAO.

• Inflamación sistémica: Cuando tu cuerpo está inflamado a nivel celular tu sistema inmune se desregula y contribuye a pobre eliminación de histamina.

• Disbiosis intestinal o desbalance entre tu bacteria buena y mala en el intestino: ciertas bacterias producen histamina, cuando no hay balance entre ellas puede haber demasiada producción de histamina y por lo tanto hacerte más sensible a alergenos de fuera. Esto a su vez ocasiona inflamación sistémica.

• Un intestino permeable: ocasionado por los dos factores anteriores.

• Resistencia a la insulina: La resistencia a la insulina es inflamatoria. La inflamación sistémica ocasiona desbalances entre tu bacteria buena y mala y puede influir en la sobre activación de mastocitos.

• Predisposción genética.

• Un hígado congestionado: cuando tu hígado no elimina eficientemente estrógeno.

• Estrés crónico.

• Algunos antidepresivos y analgésicos pueden emperorar la intolerancia a la histamina.

• Exceso de estrógeno: El estrógeno estimula la activación de los mastocitos.

La relación histamina-estrógeno

En las mujeres, la producción de estrógeno alcanza niveles muy elevados en diferentes etapas del mes y de la vida fértil, como por ejemplo cuando el ciclo menstrual va a iniciar y en perimenopausia cuando el estrógeno se comporta errático y permanece más elevado por la falta de progesterona, característica de esta etapa.

La perimenopausia y menopausia son etapas de exceso de estrógeno o dominancia de estrógeno porque hay déficit de progesterona En este post te explico más. A menos progesterona mayor estrógeno.

¿Por qué importa?

El estrógeno estimula a los mastocitos a liberar histamina.

La progesterona mantiene regulados a los mastocitos.

En mujeres que todavía menstrúan estos síntomas se pueden ver más exacerbados cercana la ovulación cuando el estrógeno está más elevado (más o menos a la mitad del ciclo) y/o antes de la menstruación, cuando la progesterona baja abruptamente.

El círculo vicioso histamina-estrógeno-histamina

Cuando el estrógeno está elevado liberas más de tu propia histamina, la histamina a su vez, estimula a los ovarios a liberar más estrógeno, y aquí tenemos un círculo vicioso estrógeno-histamina-estrógeno en excesos.

Además, el exceso de estrógeno inhibe a la enzima DAO. Esto para muchas mujeres significa que no toleren bien su propio estrógeno y que los síntomas premenstruales se exacerben demasiado, al punto de sacarlas de su ritmo de vida normal.

Para muchas otras, el inicio o empeoramiento de síntomas alérgicos en todas las etapas de la vida fértil que te mencioné arriba.

Intolerancia a la histamina y terapia de reemplazo hormonal

Muchas mujeres se sienten significativamente mejor al iniciar una terapia de reemplazo hormonal, ¡pero! cuando hay intolerancia a la histamina sus síntomas podrían empeorar porque no están tolerando bien el estrógeno.

¿Podrías tener exceso de estrógeno en postmenopausia?

Absolutamente sí. Esto se debe principalmente a estrógenos de fuera o exo-estrógenos. Que será tema de otro artículo pero se encuentran en químicos en tu ambiente: productos de cuidado personal, plásticos en la cocina, teflón, pesticidas y aromas artificiales entre otros. Estos compuestos químicos molecularmente son prácticamente idénticos a los estrógenos y por lo tanto actúan como tales en tu cuerpo. Pueden interferir con la función de la tiroides y de la testosterona. También contribuyen a aumento de peso. Algunos se conocen como obesógenos.

La pastilla anticonceptiva

La pastilla anticonceptiva combinada (que contiene estrógeno sintético) ocasiona un exceso de estrógeno porque su función principal es impedir la ovulación mes con mes, (además de que te provee de estrógeno continuamente). Sin ovulación no hay progesterona, sin progesterona hay dominancia de estrógeno. Para muchísimas mujeres esto puede significar un problema constante de síntomas de intolerancia a la histamina que se pueden confundir o unir a otros problemas que deberían resolverse primero.

El problema no es tanto el exceso, sino la capacidad de tu cuerpo de eliminar histamina

Tu cuerpo tiene la capacidad de eliminar el exceso de histamina eficientemente si:

• Tus hormonas están en balance (no hay cortisol en desbalance)
• Tu salud metabólica es buena (no hay resistencia a la insulina, síndrome metabólico o diabetes)
• No estás inflamada a nivel celular (inflamación sistémica)
• Tu salud intestinal es buena (la integridad de tu intestino no está comprometida)
• Hay un buen balance entre tu bacteria buena y mala en el intestino
• Tu hígado está saludable y elimina estrógeno adecuadamente

¿Qué hacer?

Antes de ir corriendo a google a buscar alimentos ricos en histamina para eliminarlos (aunque te puede ayudar un poco), es muy importante que atiendas la salud de tu intestino, apagues la inflamación sistémica, reviertas la resistencia a la insulina, ayudes a tu hígado a eliminar estrógeno y que aprendas a balancear tus hormonas con un acercamiento funcional e integral. Yo te enseño cómo.

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¿Qué puedes hacer hoy?

Si tú sospechas que tienes intolerancia a la histamina, debes saber que los síntomas se superponen con otros síntomas relacionados a otras condiciones y desbalances como un intestino permeable, disglicemias (que tu glucosa se esté comportando errática), resistencia a la insulina, falta de sueño, demasiado estrés o falta de hidratación y deficiencias de vitaminas y minerales, entre otras posibles causas.

Nada en tu cuerpo funciona solito.

• Empieza por poner en tu plato sólo alimentos que la naturaleza nos dió, agrega más verdes a tu plato, hidrátate bien, descansa más y come suficiente proteína de buena calidad.

• La frescura de tus alimentos es muy muy importante. Si estás acostumbrada a cocinar para varios días (algo que yo recomiendo muchísimo), evita a toda costa refrigerar por más de 3 días ya que mientras más tiempo pasa en refrigeración un alimento, más histamina. Es mejor congelar el mismo día que los preparas.

• Evita fermentos y alcohol, ya que son altos en histamina.

• Incluye alimentos ricos en vitamina C en tus tres comidas. La vitamina C actúa como un antihistamínico natural.

• El manejo de estrés es muy importante para evitar mayor liberación de histamina.

No hay un tratamiento específico para la intolerancia a la histamina. Lo que tu médico podría recomendarte son algunos medicamentos sintomáticos que podrían ayudarte a pasarla mejor como los tan conocidos antihistamínicos. Siempre consulta a tu médico.

Cuando yo pasé por ahí me era imposible completar un día sin un antihistamínico porque mis alergias estaban a todo ¡pero no tenía idea de todo esto! Por eso escribí un ebook con los 3 errores más grandes que están cometiendo la mayoría de las mujeres en estas etapas de la vida. Descárgalo y entérate cuáles son❕